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El puerto se convirtió en un auditorio al aire libre en el que se presentó su nuevo disco.

El Sábado Santo llanisco tuvo una nota musical de excepción: la presentación en España del nuevo disco de Bras Rodrigo titulado A pause in New York. El puerto de Llanes fue un auténtico auditorio al aire libre para las melodías que Bras Rodrigo y su grupo de experimentados músicos llevaron al corazón de la villa. Un total de 17 temas y cuatro bises que Bras y sus chicos y chicas interpretaron en algo más de hora y media, ante un público atento y entusiasmado ante lo que escuchaba.

La pausa llanisca de Bras Rodrigo no defraudó en absoluto sino todo lo contrario: el público quedó gratamente sorprendido tanto de la interpretación como de la calidad de los temas. Ya durante la tarde, y con el puerto llanisco abarrotado literalmente de visitantes, la prueba de sonido se convirtió en una especie de inesperado concierto, que los allí presentes acogieron como una grata sorpresa.

Bras Rodrigo sintió ayer toda la potente inspiración del auténtico mar celta que tenía a su lado y de la cordillera del Cuera y los Picos de Europa. De hecho para afinar y templar su gaita se dio una vuelta por el puerto de Llanes y tocó magistralmente durante la tarde algunos temas de su último disco con los Cubos de la Memoria como telón de fondo.

El concierto-presentación de A pause in New York fue un colofón cultural brillante para la Semana Santa llanisca.

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El gaitero Bras Rodrigo presentará el próximo sábado en Llanes su último disco titulado «A pause in New York».  El concierto tendrá lugar en la explanada exterior del puerto de Llanes y comenzará a las 23.30 horas. Rodrigo mostró su satisfacción por presentar su último trabajo musical en Llanes. «No se me ocurre un sitio mejor para hacerlo», indicó. El disco, según el autor, es un homenaje a la gran acogida brindada por la comunidad irlandesa en Nueva York que, desde 2005, acogen a los asturianos que toman parte en el desfile de San Patricio, así como a la cultura celta del arco atlántico. En la imagen, la edil llanisca Marisa Elviro y Rodrigo.

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El músico presentará en la noche del sábado su nuevo disco, ‘A pause in New York’ con un concierto en la explanada exterior del puerto.

«Algo completamente diferente a lo que la gente podría esperar de un disco compuesto por un gaitero». Así se refería Bras Rodrigo a su nuevo trabajo, en el que bebe de «fuentes tan dispares como los sonidos más clásicos y tradicionales, la música folk o las bases electrónicas», entre otras. Un disco especial que el maestro gaitero presentará este sábado con un concierto en la explanada exterior del puerto de Llanes, según explicó ayer la concejala de Cultura, Marisa Elviro, quien se mostró encantada de poder contar con un músico como Rodrigo en la villa.

La cita será a las 23.30 horas y en el escenario le acompañarán ocho experimentados músicos, entre guitarrista, percusionistas, bajista, teclista, batería, violinista y cantantes.

Este nuevo disco, explicó, pretende ser un homenaje al Arcu Atlánticu. «Mucha gente piensa que termina en Finisterre y Escocia, pero lo cierto es que existen vestigios desde el Neolítico de que teníamos una cultura, una arquitectura común también en la Laponia finlandesa y en la costa este de Estados Unidos y Canadá, plagadas de emigrantes irlandeses, escoceses, gallegos y asturianos», indicó. Un homenaje, continuó, que se extiende a la comunidad irlandesa en Nueva York, «la más importante» de la ciudad y que «tan bien trató a las bandas asturianas desde 2005, primer año en que tuvimos presencia en el Desfile de San Patricio», explicó Rodrigo, responsable de esa primera incursión de una banda de gaitas asturiana en la gran manzana.

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“Bras y la gaita son una prolongación del hombre, la pasión y el instrumento asturiano por antonomasia”. Lo dice el crítico musical Aurelio Argel y su visión de Bras Rodrigo (Carreño, 1978) es también el reflejo de lo que uno puede encontrarse en su nuevo disco A pause in New York, una obra con título en inglés “en honor a los irlandeses” que será presentada en Llanes, durante un concierto gratuito que tendrá lugar este sábado, día 15.

“Es la primera vez que compongo con voz”, asumía el músico, maestro gaitero, que anunció hoy en el Ayuntamiento de Llanes su primer concierto en solitario que servirá para hacer la “presentación mundial” de este disco tan especial. “No se parece en nada a lo que se espera la gente encontrar en el disco de un gaitero” porque lo que incluye este CD de 12 pistas es “música que a mí me gusta”, y en la que el autor asume no haber tenido ningún límite, simplemente, “bebo de las fuentes que me gustan, la fuente clásica, la tradicional, la folk, las bases electrónicas…”, y el resultado es un trabajo muy personal. Se puede ver “en cada melodía”, donde la impronta del artista está muy presente. “Intento exponer lo que me sugiere una determinada circunstancia, una tormenta, una imagen, una persona,  un paisaje,  una emoción…” y todo, “está relacionado con el Arco Atlántico donde vivimos”, ha dicho durante el acto, en el que estuvo acompañado de la concejal de Cultura, Marisa Elviro.

Capilla de San Patricio

Porque su disco es un homenaje doble, a ese Arco Atlántico, de un lado, y a los irlandeses, de otro. Al Arco Atlántico “donde vivimos” porque sus fronteras se extienden, ha dicho el gaitero, “a la costa Este de Estados Unidos y Canadá”, donde “hubo gente que tuvo que ir a buscarse la vida”. Y a los irlandeses por “la acogida que nos brindaron desde que Asturias lleva bandas de gaitas al Desfile de San Patricio de Nueva York (Bras Rodrigo es el Coordinador-Ejecuto para Europa del Desfile), que es el Festival celta más antiguo, más grande y más importante del mundo”.

Uniendo ambas premisas, Rodrigo ha considerado Llanes como el lugar “perfecto” para presentar su nuevo trabajo. No en vano, es en el pueblo llanisco de Pancar donde está “la única capilla de San Patricio” de España, “qué mejor sitio para presentar este homenaje a la cultura celta”, ha evidenciado el artista.

Será, además, “la primera presentación en directo del trabajo” que le ha llevado producir un año y que contará con la presencia en un escenario de ocho músicos, “guitarra, batería, bajo, percusionistas (dos), un teclista, un cantante y un violinista (también cantante)”. Junto a Bras Rodrigo darán vida a un concierto que tendrá lugar en la explanada del puerto de Llanes. Se prolongará, ha anunciado, durante un mínimo de una hora y media.

“No habrá carpa para que se pueda ver y oír desde lejos” la composición del segundo gaitero asturiano que ha lanzado un disco a nivel nacional, ha afirmado la edil de Cultura.

El concierto “en el que se reivindicarán las raíces celtas a lo largo del mundo”, ha dicho Elviro, “dará bastante que hablar”, porque Rodrigo “tiene una altura importante” y durante el desarrollo de la cita musical, ha augurado la concejal, se podrá comprobar “su talla como gaitero y su pasión celta”.

El pueblo de Llanes “está encantado de acogerlo” y agradecerle así que haya sido el artífice del paso de la banda de gaitas Llacín por el desfile de Nueva York. “Ahora queremos que Bras Rodrigo tenga aquí su espacio y pueda demostrar su propia obra para que todos podamos disfrutarla”, ha propuesto Elviro.

Y quien no pueda asistir al concierto, podrá adquirir el CD por un precio de 9,99 euros en “todas las plataformas digitales y en todas las tiendas que venden música”.

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Bras Rodrigo presenta en concierto «A Pause in New York», el próximo 15 de Abril a las 23.30, en Llanes Explanada exterior del puerto.

A pause in New York Aunque a priori pueda parecer un disco folk no es exactamente eso, o al menos así lo explica el padre de la criatura, el gaitero y compositor asturiano Bras Rodrigo cuando habla de su nuevo dis co “A pause in New York”: “Evidentemente A pause in New York tiene un sustrato folk que deriva de mi vocación por la música tradicional, pero va más allá del folk. En realidad es una exploración de nuevos espacios musicales y emocionales , siempre desde una filosofía vital y artís ti ca que yo definiría como céltica”.

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• Bras Rodrigo espeya en «Xermandía» el so recorríu musical pel mundu.
• Bras Rodrigo presenta en conciertu ‘A pause in New York’ en Llanes

El maestru gaiteru Bras Rodrigo ta acabante d’espublizar el so segundu trabayu discográficu: ‘A pause in New York’ (Goxe Producciones). Nesti discu’l de Perlora fai un viaxe musical pel Arcu Atlánticu nel que recopila les sos esperiencies por estes tierres.

‘A pause in New York’ llega once años depués de ‘Xermandía’, el so primer álbum discográficu como gaiteru solista, anque nesti tiempo Rodrigo nun aparó cola so trayeutoria musical, venceyada principalmente a la Banda de Gaites de Corvera d’Asturies, una de les más internacionales del país y la primera non irlandesa o escocesa en ser nomada meyor formación del prestixosu Saint Patrick´s Day Parade de la ciudá estauxunidense qu’apaez nel títulu d’esti trabayu. “Quier ser un viaxe musical per tola xeografía del llamáu Arcu Atlánticu, una rexón que va más acullá de lo estrictamente xeográfico, con llazos culturales comunes dende l’antigüedá. Trátase d’unes tierres rellacionaes ente sí que funden los sos raigaños na mesma prehistoria; los xeógrafos falen tamién de la influyencia del entornu natural na construcción d’un paisaxe cultural asemeyáu nes costes occidentales europees, anque la obra de Bras Rodrigo abarca un territoriu más ampliu que va dende Escandinavia hasta’l Finisterre na Península Ibérica”, espliquen dende Goxe Producciones.

Nel discu van poder atopase, poro, temes inspiraos nesos llugares visitaos por Rodrigo, amás d’arreglos de delles melodíes tradicionales de los mesmos. “La orixinalidá d’esta obra reside en que quier dar una visión de conxuntu del marcu xeográfico-cultural nel que ta asitiáu Asturies. Les pieces muestren estilos bien distintos, con aires acústicos, electrónicos, new age, rockeros o más comerciales”, apunta la discográfica pa después definir la obra como “ecléctica y ensin complexos”.

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Siendo muy pequeño escuchó una gaita y sin saber qué artilugio era el que sonaba, dijo «yo quiero tocar eso». Poco tiempo después, la prematura y trágica muerte de su abuelo en un accidente laboral en Ensidesa lo marcó para siempre.

Bras Rodrigo Álvarez Prieto, conocido por algunos como «el celta», es un músico censado en Perlora, bajo el secreto influjo del Cabu Peñes, y como no podía ser de otra manera es un claro ejemplo de música con idiosincrasia, o mejor dicho, un claro ejemplo de como una marcada identidad se expresa a través de la música.

El país musical de Bras no conoce las fronteras administrativas. Es más bien un mapa de emociones dibujadas en paisajes íntimos y sociales definidos por un acervo cultural común: el del mundo atlántico en su más alta y amplia expresión.

El país de Bras se parece más a Ávalon que al Arco Atlántico, a la Europa de las regiones o a la Unión Europea. Y su gaita – uno de los instrumentos en los que canaliza su virtuosismo artístico – se asemeja a Excalibur, pues como la espada del rey Arturo, ha sido forjada en su personal universo celta.

Bras Rodrigo es actualidad artística porque acaba de publicar «A pause in New York», una obra profundamente ecléctica y por esta razón indefinible. Tiene reminiscencias de misticismo celta, de tradiciones atlánticas paganas, de leyendas ancestrales, llegando a la más pura transmigración étnica, a través de los espíritus lenapes que vagan en la partitura de A pause in New York – composición que da nombre al disco -.

En esta obra, el músico se deconstruye con total naturalidad en una especie de druida urbanita o de hípster artúrico y astúrico, que deambula por la Gran Manzana neoyorkina en busca de su identidad soñada…

Bras es un rapsoda de la pasión, en sus distintas expresiones musicales, y en esta obra se instala por momentos en el mundo de las hadas – muy avalonianas también -, entendidas como un espacio de ensoñación creativa, romántica, sensual e identitaria.

La  nostalgia, sentimiento muy celtic, aderezada con tintes de misterio y de brumas atlánticas, pasea como de puntillas en algunos temas de esta obra maestra. Casi podríamos decir que «A pause in New York» es un tránsito de almas en busca de autor, casi tan intenso como el de la Quinta Avenida o Times Square en hora punta…

A pause in New York es una muestra de «transgénero» musical, porque no se ajusta a ninguna identidad artística previamente definida: no es música tradicional, no es clásica, no es folk, no es pop, no es rock, no es electrónica… pero bebe de éstas y otras.

Escuchando cada composición una a una, lo mismo viajas a una gran epopeya medieval, a una batalla, a una fiesta, a un nido de amor sin fin, a un sueño infantil, a un ritual étnico-espiritual, o sencillamente te dejas envolver en la espiral del tiempo y de las brumas nórdicas… de Ávalón, la isla de las manzanas y las hadas…, y vuelta a empezar.

Bras Rodrigo pertenece al mundo de los gaiteros, esos músicos que a lo largo de la historia han sido demonizados o trivializados en el imaginario popular. Esos músicos que en muchas ocasiones no han encontrado ni encuentran un lugar digno y de merecido reconocimiento en el arte.

«A pause in New York» es un claro exponente del excepcional compositor y músico que lleva dentro este gaitero de Perlora que con esta obra engrandece la leyenda músical astúrica de horizonte universal.

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Bras Rodrigo, director de la banda de Corvera, impulsa una exposición temporal previa a la inauguración oficial del local.

Los ediles debatirán esta mañana en una comisión de Economía la aprobación definitiva de la cesión de las escuelas de Villa para convertirlas en el primer centro de interpretación de la gaita y los países celtas. Este local estará gestionado por la Fundación Banda de Gaites del Principáu d’Asturies y coordinada por Bras Rodrigo Álvarez Prieto. El también director de la banda de gaitas de Corvera confía en que el «museín» abra sus puertas para Navidad, al menos, con la exposición de una muestra temporal aún sin concretar. «Estamos muy ilusionados con este proyecto y queremos sacarlo cuanto antes adelante, a lo mejor proponemos abrir en diciembre para tener una primera toma de contacto y en los siguientes meses, lo abrimos de manera definitiva», explicó el futuro gestor del primer centro museístico del municipio corverano.

Según la idea inicial, el nuevo espacio, que se habilitará en las antiguas escuelas de Villa, contará con un lugar expositivo para mostrar diferentes tipos de gaita, no solo asturianas, sino también de otras regiones del Arco Atlántico como Galicia, Escocia, Irlanda y Bretaña. La intención de Bras Rodrigo es también reservar una vitrina para colocar los trofeos y distinciones conseguidas por la banda de gaitas de Corvera en sus dos décadas de historia y viajes por medio mundo. Además, Rodrigo tiene intención de exponer en el nuevo centro parte de la colección de gaiteros en miniatura que ha ido recopilando durante varios años. Una de las cuestiones que también falta por definir serán las actuaciones musicales a desarrollar en este espacio ubicado en la zona rural del concejo. La asociación de vecinos de Villa ve con buenos ojos la apertura de este centro de interpretación con el único objetivo de «dar vida al pueblo y a la cultura» en un edificio que ha estado en desuso en los últimos años. El local vecinal de Villa se halla a pocos metros del que será el primer museo del concejo. Así las cosas, la Fundación Banda de gaites del Principáu d’Asturies quiere ponerse a trabajar ya en los contenidos y en la programación de un entorno que ampliará la oferta cultural y tradicional del municipio.

El asturiano vio reconocida hoy su labor como corresponsal en Nueva York de Antena 3.

El corresponsal asturiano José Ángel Abad fue distinguido hoy como ‘Custodio de San Patricio’ por la Asociación de Amigos del Desfile de San Patricio de Nueva York en Europa. La entrega tuvo lugar en la Capilla de San Patricio de Pancar en Llanes, a partir de las 13.00 horas, de la mano de Bras Rodrigo Álvarez Prieto, presidente del mencionado colectivo y Coordinador en España del SPDNYC con la colaboración del Ayuntamiento de Llanes.

De este modo, la asociación Amigos del Desfile del Día de San Patricio reconoció, con su galardón anual, la labor de José Ángel Abad Pérez como corresponsal en Nueva York de Antena 3.

La asociación concede su galardón a personas y colectivos que con su atención y dedicación a la representación española en los sucesivos desfiles del Saint Patrick’s Day neoyorquino hayan promocionado las participaciones de España y las comunidades autónomas españolas.

Según indicaron desde la organización, «José Ángel Abad se ha distinguido, a través de sucesivas ediciones, por dar cobertura en directo, a pie de calle, en la Quinta Avenida por la que transcurre el desfile a la participación hispana en fecha tan señalada que reúne a cientos de miles de neoyorquinos y a cientos de millones de telespectadores de EEUU y de todo el mundo».

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